No es una novedad que las empresas, de cualquier tamaño y sector, a lo largo de la historia han buscado la forma de ser más eficientes, más productivas y, con ello, mejorar sus costes, tanto económicos como temporales. Una meta, como decimos histórica, pero que, en los últimos años y de la mano, imprescindible, de la tecnología tiene un nombre como principal aliado: la Automatización Robótica de Procesos o RPA.
Unas siglas tras las que se esconde una de las principales tendencias del mercado de las TI, según apuntan estudios y consultoras.
Una automatización de procesos que, en 2022, ya habrán abrazado el 85% de las grandes empresas, según Gartner, generando un mercado de 2.400 millones de dólares.
Y todo apunta a que estos datos no dejarán de crecer.
Pero, ¿en qué consiste realmente esta tecnología? ¿Qué ofrece a las empresas que explique el éxito en su adopción?
RPA (Robotic Process Automation) es una tecnología que permite automatizar tareas repetitivas, de gran volumen y basadas en reglas, que requieren un elevado esfuerzo manual pero aportan escaso valor a los procesos (como copiar y pegar datos entre aplicaciones, rellenar formularios, extraer información de documentos, etc.). Muchas de estas tareas aún dependen de la intervención humana y restan recursos a actividades de mayor valor añadido. Los robots de RPA liberan a las personas del trabajo más tedioso trabajando con sistemas y datos exactamente como lo hacen los humanos, a través de ventanas e interfaces de usuario, pero mucho más rápido y con mayor precisión.
Víctor Ayllón, vicepresidente del RPA Centro de Excelencia de Appian.
Automatizando las tareas de negocio rutinarias
Como señalábamos, la automatización no es algo nuevo pero sí las tecnologías que hoy la hacen posible.
Las soluciones de robotización de tareas llevan muchos años en el mercado, pero en los últimos 6-7 años se ha visto un avance exponencial en el número de empresas y soluciones existentes, gracias a que las nuevas capacidades de grabación de tareas y creación de bots sin necesidad de codificarlos ha simplificado su despliegue en empresas y departamentos de cualquier tamaño, y a que la integración con distintos sistemas de automatización y las funcionalidades de Inteligencia Artificial han permitido ampliar enormemente su utilidad.
Fernando García Estévez, responsable de soluciones RPA en IBM España.
Una evolución tecnológica que también destaca Francisco García, director general de PFS Tech:
RPA es un término relativamente nuevo, pero no el concepto que hay detrás, ya que desde hace décadas las compañías han buscado formas de industrializar la ejecución de tareas repetitivas que diariamente se hacen sobre aplicaciones informáticas. Hoy, esta tecnología permite utilizar robots de software (aplicaciones) que se configuran con el objetivo de manejar otras aplicaciones informáticas de la misma forma que lo hace un usuario para realizar tareas repetitivas y basadas en reglas.
¿El objetivo?
Liberar a los empleados de este tipo de tareas, repetitivas y tediosas, del tiempo que les dedican para así aportar un mayor valor en otras labores más estratégicas.
Las personas son un recurso escaso y valioso que tiene que dedicarse a tareas con mayor valor añadido, que ayuden a mejorar la experiencia del cliente o que por su complejidad requieren de la intervención humana.
Christian Barckhahn, Product Marketing Global Senior Director para la unidad de negocio de Customer Experience Management en OpenText.
Una “liberación” que, además de permitir a esos empleados dedicarse a procesos y tareas de mayor valor, como señalábamos, también incrementa su satisfacción personal y, con ello, su productividad.
RPA libera a los empleados de tareas repetitivas y mundanas y les permite concentrarse en el trabajo creativo y estratégico: las cosas que sólo los humanos pueden hacer. Un estudio de la Universidad de Goldsmiths reveló que las tecnologías de automatización están amplificando la experiencia humana y así los empleados que trabajan junto a bots se muestran un 38% más comprometidos y el 70% señala que se siente más satisfecho dentro de la empresa.
Oscar Martínez Domínguez, director regional de Ventas para España de Automation Anywhere.
El impacto más directo en los empleados es que la automatización robótica de procesos les libera de tareas empresariales repetitivas y tediosas, todas aquellas tareas que hay que hacer pero nadie quiere hacerlas porque consumen mucho tiempo y son cansinas y aburridas. Al no tener que dedicarse mucho tiempo a tareas de poco valor, no solo para la organización si no a nivel profesional, los empleados sienten más satisfechos con su trabajo y más motivados. La automatización les brinda la oportunidad de dedicarse a las tareas que requieren creatividad, capacidad cognitiva y la habilidad de tomar decisiones y resolver problemas, lo que hace que se sienten más valorados en su trabajo”.
Franck López, Vicepresidente de Value Engineering de UiPath.
Por lo tanto y frente a no pocas críticas y miedos que en torno a la adopción de tecnologías RPA han surgido, el mensaje parece claro: la automatización robótica de procesos es un aliado, un complemento, una herramienta para los empleados y no una amenaza para ellos.
Las tareas repetitivas y rutinarias no existen en el vacío. Por lo general, forman parte de procesos empresariales integrales que hacen que una empresa funcione y brinde valor a sus clientes. La fuerza de trabajo digital de los robots RPA es, por lo tanto, parte de la estructura integrada global de personas, procesos y sistemas de información que maneja un negocio. La automatización de los procesos digitales implica la coordinación de todos estos actores juntos, y realmente se trata de la transformación, no de la tecnología.
El uso de robots en tareas aisladas en un proceso ineficiente sin mejorar el proceso simplemente automatiza un proceso ineficiente. Los robots más inteligentes simplemente no hacen procesos más inteligentes. Además, los robots no reparan las ineficiencias del proceso, las personas lo hacen.
Miguel Valdés, CEO de Bonitasoft.